Abdominoplastia

Cualquiera con exceso de piel y grasa puede ser candidato a esta operación. Las mujeres tienen mayor problema debido al exceso de piel y grasa tras los embarazos, y su empeoramiento al perder peso. Los músculos de la pared abdominal pueden estar debilitados por el embarazo apartándose de la línea media (devaricación de los rectos abdominales). Los hombres son igualmente afectados por la pérdida de peso. Las estrías son cicatrices debido al estiramiento excesivo de la piel, que normalmente aparecen en la parte baja del abdomen. No existe un tratamiento específico para las estrías pero la gran mayoría pueden ser extirpadas en una reducción abdominal.

Aquellos pacientes que son incapaces de tensar la pared abdominal con ejercicio o que quieren conseguir un abdomen mas liso se pueden beneficiar de esta operación.

Las cicatrices son extensas y evidentes con una cicatriz principal que recorre la parte baja de abdomen y otra alrededor del ombligo en la reducción abdominal estándar. La calidad de estas cicatrices depende de la capacidad de cicatrización individual, y es esencial que los pacientes entiendan donde se van a situar estas cicatrices. Las líneas de sutura se intentan esconder bajo los márgenes de la ropa interior o el traje de baño, aunque con el tiempo esto puede cambiar y hacer que las cicatrices se hagan visibles.

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Puede existir un cierto adormecimiento o hipoestesia en la parte baja abdominal tras la cirugía que generalmente es transitorio y se recupera tras 6 a 12 meses, pudiendo quedar en algunos casos una zona de anestesia residual.

La inflamación por encima de la cicatriz se debe a la colección de líquido que drena a la ingle, este edema normalmente se resuelve en unos meses tras la operación.

La piel se estira hacia abajo por lo que la cintura no se estrecha. Si esto es lo que se quiere, es necesario realizar una cicatriz vertical que generalmente se contrae y es estéticamente más pobre.

El tejido de la pared abdominal es generalmente más grueso que el de la ingle y si no es extirpado o se realiza una ligera liposucción se produce un abultamiento que persiste sobre la cicatriz.

Los efectos beneficiosos de la operación se mantendrán mejor y serán más duraderos si el paciente sigue ejercitando los músculos abdominales y manteniendo el peso. Un embarazo después de la operación producirá que la piel se estire de nuevo y se produzcan las estrías, aunque probablemente en un grado menor.

La abdominoplastia estándar es un procedimiento considerable que requiere un tiempo de hospitalización de 1 a 2 días. Los drenajes son retirados cuando dejan de drenar sangre y fluido seroso pocos días después de la operación. Este líquido puede reacumularse una vez que los drenajes se han retirado y se puede eliminar con aspiraciones regulares.

La cicatrización puede ser lenta sobre todo en la parte central de la herida y ocasionalmente son necesarias curas regulares durante algunas semanas. Esto es más frecuente en pacientes con exceso de peso o aquellos que fuman, dejando una cicatriz mas extendida que requerirá revisión en un futuro.

Operaciones en un segundo tiempo se llevan a cabo para refinar los resultados, revisando las cicatrices y realizando liposucciones limitadas. El desplazamiento del ombligo ha sido excesivamente publicado y es una complicación rara.

Trombosis venosa profunda y embolismo pulmonar son algunas de las complicaciones generales que todo procedimiento quirúrgico conlleva.

Si existe un exceso de peso es conveniente llevar a cabo una dieta ya que los mejores resultados se obtienen en aquellas personas que poseen un peso adecuado a su altura. Si eres fumador existe un riesgo mas elevado de infecciones pulmonares y en particular la cicatrización de la herida abdominal es peor.

La estancia en el hospital será de 1 a 3 días dependiendo de la recuperación, necesidad de transfusión o cantidad de líquido drenado. Los drenajes suelen ser dos a cada lado del abdomen y se retiran cuando drenan menos de 30 cc en 24 horas.

Durante las primeras horas es necesarios que se mantengan las rodillas y la cadera flexionadas evitando una tensión excesiva sobre la cicatriz abdominal.

Un exceso de actividad durante los primeros días reduce la capacidad de cicatrización e incrementa la acumulación de líquido. Actividades ligeras deben comenzarse a los 10 días. Los deportes no deben practicarse hasta las 6 semanas especialmente si se han reforzado lo músculos abdominales con suturas. El uso de un corsé es necesario para reducir la inflamación y mejorar el confort en el primer mes.